El padre Timothy Hirten, de 66 años, de la arquidiócesis militar de Estados Unidos se suicidó el 15 de agosto. Según informes de los medios de comunicación, fue arrollado por un tren.
El arzobispo militar Timothy Broglio dijo en un mensaje que Hirten, habitualmente una persona exuberante y sociable, sufría de depresión y estaba separada de sus tareas en la Base Shepherd de la Fuerza Aérea, en Texas, debido a las restricciones del coronavirus.
Antes de ser sacerdote, Hirten fue jugador profesional de baloncesto en Europa, Filipinas y Estados Unidos. También fue un notable bailarín irlandés.
Hirten estudió en el Angelicum mientras vivía en el Pontificio Colegio Estadounidense, en Roma. Fue ordenado en octubre de 1993 por la diócesis de Brooklyn.
Alguna vez dijo:
“He sido un sacerdote feliz y estoy agradecido por el don del sacerdocio y la capacidad para ver cómo las personas se benefician con las gracias de los sacramentos”.
Con información de Gloria.tv
