Debe de ser un récord, imagino: este año se ordenarán en Irlanda más obispos que sacerdotes, como en una triste versión eclesial del ejército de Pancho Villa, informa el diario irlandés The Independent.
Este próximo domingo, Michael Neary, arzobispo de Tuam, ordenará a Shane Costello en la Basílica de Knock, en el condado de Mayo. “Esto es insostenible”, declara al diario Paddy Byrne, párroco de Abbeyleix and Ballyroan que, a sus 46 años, es el segundo sacerdote más joven de toda su diócesis.
Byrne advierte de la desaparición de la familiar figura del sacerdote de buena parte de la Irlanda rural, donde, añade, siguen en activo sacerdotes con más de 80 años. La Covid, que amenaza especialmente a los sujetos de edad avanzada, ha reducido aún más la presencia de un claro que, de media, ronda la zona de peligro y ha tenido que enclaustrarse.
La primavera de la Iglesia es ciertamente extraña.
Con información de InfoVaticana/Carlos Estaban