* Planea reducir 15% la demanda de gas desde el 1 de agosto de 2022 hasta el 31 de marzo de 2023.
* Tras el lanzamiento de las sanciones contra Rusia y la reducción del flujo de gas del Este, Europa camina hacia un «descenso energético solidario».
* Europa será más dependiente del gas licuado de E.U. Además de paneles solares producidos en China.
Los Gobiernos de la Unión Europea acordaron ayer una posición común , con el único voto en contra de Hungría, sobre el racionamiento del uso del gas natural ruso para este invierno, con el fin de evitar nuevos recortes. Los ministros de energía de la UE aprobaron un nuevo reglamento del Consejo sobre medidas coordinadas para reducir la demanda de gas ruso, el borrador fue propuesto por la Comisión el pasado 20 de julio, con el objetivo de reducir la demanda de gas en un 15% del 1 de agosto de 2022 al 31 de marzo de 2023, con excepciones que pueden llegar a eximir o reducir los recortes al 7%.
Europa se encamina, tras el lanzamiento de las sanciones económicas contra Rusia , hacia un ‘descenso energético solidario’, especialmente hacia Alemania que sufre los cortes de gas rusos mucho más que Hungría, Austria e Italia, pero también un descenso económico como prevé el último informe del Fondo Monetario Internacional:
- El crecimiento de Europa podría caer cerca de cero en 2023, en caso de que se materialicen los riesgos asociados con la suspensión del gas ruso y el aumento de la inflación.
- Tras la decisión de ayer, la Comisión también tendrá la posibilidad de declarar, previa consulta a los Estados miembros, el estado de «alerta de la Unión» por razones de seguridad del suministro e imponerles una reducción obligatoria de la demanda de gas.
- El estado de alarma de la Unión podrá activarse en presencia de un riesgo sustancial de escasez grave de gas o de una demanda excepcionalmente elevada.
Los Estados miembros deben actualizar sus planes energéticos e informar a la Comisión cada dos meses. Los países que soliciten el suministro de gas apelando al principio de solidaridad estarán obligados a demostrar lo que han hecho para reducir la demanda internamente. La legislación prevé medidas voluntarias a nivel nacional para reducir el consumo de gas y, en caso de que el ahorro no sea suficiente, la activación de acciones solidarias de los 27 países miembros.
«Sé que la decisión no fue fácil, pero creo que al final todos entendieron que este sacrificio es necesario. La adopción de la propuesta de reducción de gas en un tiempo récord sin duda ha fortalecido nuestra seguridad energética común», dijo el ministro de Industria checo, Jozef Sikela , después de presidir la reunión en Bruselas. Las medidas sugeridas se hacen eco de las de la Agencia Internacional de Energía (AIE), que pidió más sacrificios, e incluir medidas como configurar los sistemas de aire acondicionado a una temperatura más alta en el verano.
A partir de octubre, los gobiernos nacionales deberán ahorrar gas pidiendo a los hogares que bajen el termostato 1°C e imponiendo una reducción en la calefacción de los edificios públicos, oficinas y edificios comerciales. En el caso de una grave escasez de gas, la industria se cortará primero, aunque es probable que se prioricen y conserven los servicios esenciales, como la generación de electricidad. “Las familias son consumidores protegidos, la calefacción de las casas a gas está salvaguardada, pero todos pueden y deben ahorrar gas y seguiremos impulsando las ideas planteadas en el plan de ahorro energético, declaró el Comisario Europeo de Energía Kadri Simson.
La decisión tomada ayer solo fue posible gracias al trabajo inteligente y serio del gobierno conservador de la República Checa, una clara demostración de cómo los gobiernos de centro-derecha no son ni poco fiables ni peligrosos antieuropeos. Muchos países europeos, incluidos Portugal, España, Grecia, Malta, Irlanda, los países bálticos, Polonia, Francia y Hungría, habían expresado su oposición a la propuesta de la Comisión hasta pocas horas después de la reunión. “Con los números y las reglas establecidas” a nivel de la UE, “deberíamos ahorrar alrededor de un 7% respecto a la media anual de los últimos cinco años”. Así lo aseguró el ministro de Transición Ecológica, Roberto Cingolani, al comentar el acuerdo alcanzado entre los ministros europeos sobre el plan de emergencia de la UE para el corte de gas, y agregó que Italia, gracias a la diversificación de los proveedores de gas (Azerbaiyán y Argelia en particular) ha alcanzado el 71% de las existencias .
La Comisión Europea continúa pidiendo a los países que cambien más rápidamente a otras fuentes de energía para la producción de energía, principalmente energía renovable (incluidos los paneles solares), pero también carbón, energía nuclear y petróleo.
¿Dejamos el gas ruso para tirarnos a los brazos de EEUU y China?
Estados Unidos podría superar e incluso triplicar su compromiso de destinar 15.000 millones de metros cúbicos de GNL (gas licuado) a Europa este año, obviamente a un precio un 40-50 % superior al del gas ruso. A Europa ni siquiera le importa el creciente monopolio chino en paneles fotovoltaicos y sus componentes, la alarma grave de los últimos días es de la AIE.
Mientras tanto, los jóvenes seguidores del ‘decrecimiento feliz verde’ de Greta Thunberg amenazan públicamente con ocupar hasta el final de septiembre a diciembre, inspirados en los disturbios de París en 1968, escuelas y universidades de todo el mundo para «acabar con la economía fósil». a nivel internacional”, este es el manifiesto-llamamiento “ Acabar con los fósiles: ¡Ocupar! ”.
En resumen: nos quedaremos en el frío, con menos energía productiva, encadenados a China y EU, con jóvenes que bloquean la educación y una Comisión que, tras el estruendoso rechazo del Tribunal de Cuentas Europeo al Plan RePowerEu (no hubo 210 pero sólo 20 mil millones disponibles), es cada vez menos creíble.
Por LUCA VOLONTÉ.
ROMA, Italia.
MIERCOLES 27 DE JULIO DE 2022.
lanuovabq.
