El odio a la religión, al catolicismo, a la Iglesia, mostrado en otra de sus expresiones durante la famosa procesión de San Fermín, en España, la tarde del pasado jueves, 7 de julio.
En otras partes del mundo, se han registrado incendios de iglesias, secuestro y asesinato de sacerdotes, derribo de monumentos…
El reporte de es.news, en el caso concreto de la procesión de San fermín, precisa:
Increparon, presionaron, empujaron e insultaron a los concejales y al alcalde que formaban parte del cortejo, a los policías de guardia, al arzobispo de Pamplona, monseñor Francisco Pérez González, de 75 años, al cabildo de la catedral y al clero.
Los atacantes enarbolaron el lema «Bizi nahi dugu» [Queremos vivir en Vasconia], arrojaron vasos, arrancaron las birretas de las cabezas de los canónigos y tiraron de la capa del decano de la catedral.
Al menos tres oficiales resultaron heridos, uno con la nariz rota. Esta no fue la primera vez que se atacó la procesión que había sido suspendida los dos años anteriores debido a la histeria del Covid.
