El presidente de la Conferencia Episcopal de Francia (CEF), Éric de Moulins-Beaufort, ha asegurado que el Papa Francisco respalda las decisiones que han tomado para afrontar los casos de abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica. Sorprendentemente no han hablado una palabra sobre el documento de ocho prestigiosos miembros de la Academia Católica de Francia que desmonta las tesis del informe Sauvé.
«El Papa ha aceptado recibir a la Comisión Independiente sobre Abuso Sexual en la Iglesia (CIASE)», ha asegurado Mons. Eric de Moulins-Beaufort, presidente de la Conferencia Episcopal Francesa (CEF), que fue recibido ayer por el Pontífice, quien elogió la actuación de los obispos franceses y les animó a continuar sus esfuerzos en la lucha contra los abusos tras la publicación en octubre del informe Ciase.
A la pregunta de si el Papa había expresado dudas sobre la metodología del informe, el arzobispo de Reims respondió que esta cuestión no se había planteado específicamente. Tampoco se discutió el documento crítico enviado al Vaticano por la Academia Católica: «Fuimos sobre todo nosotros los que explicamos cómo recibimos el informe Ciase, con seriedad, tratando de dejarnos empujar y cuestionar por él», insistió el presidente del CEF.
El Papa no ha leído el informe
Los tres obispos franceses explicaron al Papa cómo habían tomado sus decisiones, partiendo de la escucha de las víctimas, «con la voluntad de dejar una actitud de prudencia, de precaución, para venir a asumir lo que estas personas victimizadas llevan desde hace décadas». En este camino, aseguró el arzobispo, «el Papa ha subrayado el carácter ejemplar y la dignidad de nuestro camino». También les animó a tomar «la escucha de las víctimas como punto central».
Tal y como había dicho el Papa en el avión de vuelta de Grecia, los obispos franceses confirmaron que el jefe de la Iglesia católica no había leído el informe del CIASE. «Le dimos el informe, pero no estoy seguro de que lo haya leído simplemente porque se lo dimos en francés», dijo el prelado, añadiendo que no estaba «seguro de que el Papa tenga mucho tiempo para coger su diccionario y leerlo antes de irse a la cama».
Los obispos trataron de resumirle el contenido. Según el obispo de Moulins-Beaufort, el Papa estaba «particularmente interesado» en la parte del informe que trata del modo en que la Iglesia en Francia trató a los «sacerdotes problemáticos» desde finales del siglo XIX hasta los años 70.
Los analistas de temática eclesial de la prensa francesar se preguntan cómo puede ser que los obispos hayan ignorado en su visita al Papa el documento de los ocho prestigiosos miembros de la Academia Católica de Francia que critican precisamente la metodología y las conclusiones del informe Sauvé.
(FC/InfoCatólica
