Por constituir una revictimización y también una contradicción para los principios de Derechos Humanos, justicia y cuidado, Juan Carlos Cruz, James Hamilton y José Andrés Murillo –víctimas del fallecido sacerdote Fernando Karadima, quien en septiembre de 2018 fue expulsado de la Iglesia Católica por las múltiples denuncias de abuso en su contra y quien murió a sus 90 años en completa impunidad— le solicitaron a la alcaldesa Emilia Ríos, a través de una carta, revocar la calidad de hijo ilustre de Ñuñoa al cardenal Francisco Javier Errázuriz.
En la misiva, recibida por la jefa comunal el 22 de diciembre pasado, quienes valientemente destaparon el caso Karadima, acusan a Errázuriz de “representar la cara más oscura del encubrimiento del abuso sexual clerical en nuestro país”. Lo anterior, ya que precisamente en la época en que ellos se atrevieron a denunciar los abusos de quien fuera el párroco de la Iglesia de El Bosque, Errázuriz era arzobispo de Santiago y “optó por proteger a este sacerdote en lugar de quienes pedimos ayuda y de quienes corrían peligro por lo que él (Karadima) hacía”.
El requerimiento de las víctimas fue acogido por la alcaldesa Ríos, y hoy esta solicitud fue votada por el concejo municipal de Ñuñoa que, de forma unánime, aprobó el revocar la calidad de hijo ilustre de la comuna que hasta hoy tenía el cardenal Francisco Javier Errázuriz.
El padre Karadima y el cardenal Errázuriz.
“Esta es una gran noticia para la comunidad de Ñuñoa y para las víctimas de abuso sexual. Creemos que este tipo de acciones van en la dirección correcta. Como comuna no podemos mantener este tipo de homenajes a personas que negaron o contribuyeron a encubrir abusos sexuales cometidos contra niños y/o adolescentes por parte de sacerdotes de la Iglesia Católica. Solidarizamos con el dolor de las víctimas y empatizamos con quienes profesan la religión católica, que confían en una institución libre de abusos. Esta es una administración que cree fehacientemente en que deben haber señales claras de reparación para las víctimas y no podemos mantener estos reconocimientos a quienes han entorpecido las investigaciones y no nos podemos quedar impávidos ante quienes se han negado a esclarecer hechos tan dolorosos”, expresó la alcaldesa Emilia Ríos.