Un joven, hijo muy amado, que dejó Mexicali para seguir a Cristo, regresó a su tierra natal rodeado de la familia, amigos y hermanos legionarios para consagrarse como diácono al servicio de las almas.
El P. Jorge Mora, LC, a través del sacramento de la ordenación; se ha identificado de forma especial con el corazón pastoral de Jesús. Para llegar a ese momento ha pasado un camino que parece largo a los ojos del mundo, pero que solo es un instante para el corazón del varón que ama a su creador y al Maestro que lo ha llamado.
La alegría de servir
En el año 2009 como universitario estudiante de la carrera de Derecho, el P. Jorge participó en las misiones de Semana Santa organizadas por el Regnum Christi en Mexicali y comparte como la experiencia de verdadera alegría, al ponerse al servicio de los demás, despertó en la inquietud del sacerdocio.
“Me di cuenta de que hacían falta sacerdotes, sacerdotes santos”.
P. Jorge Mora, LC
En medio de esa experiencia de alegría el joven misionero palpó la necesidad de la presencia de los sacerdotes en las comunidades, y la importancia de contar con sacerdotes enamorados de Cristo que desgasten su vida en favor de la salvación de las almas.
Una invitación sutil pero que le llagaba directo al alma y lo llamaba a extender esa alegría dentro de un camino de discernimiento.
“Dios ya te había elegido, ya te había llamada a una vocación especial en la Legión de Cristo”
Mons. Jesús José Herrera
En ese mismo año el P. Jorge decidió ingresar al candidatado de la Legión de Cristo y durante su estancia fue descubriendo que ese era el lugar donde podría extender esa experiencia de felicidad por servir a las almas.
Preparación para servir
Un proceso de formación de 12 años en donde no han sido exclusivos para los elementos doctrinales y académicos. Pasó varios años sirviendo en El Salvador como auxiliar de la gira vocacional de Centroamérica. Además de ese país, visitó Guatemala y Costa Rica, donde además colaboró en la pastoral juvenil.
El padre lo describe como un proceso donde ha tenido que sacar lo mejor de él y lo mejor de ese don que Dios le ha regalo. Una total colaboración con la gracia de Dios que integra elementos de formación humana, de vida fraterna y comunitaria, de apostolado que lo llevan al paso de la Iglesia inspirada por el Espíritu Santo.
Ahora como diácono, la gracia del sacramento no solo lo capacita para una misión, también toca su propio ser y lo hace un hombre nuevo. Esa gracia lo transforma en servidor, toda su vida a partir de ahora será servicio.
La dignidad para el servicio
A través de la ordenación diaconal el P. Jorge ha sido consagrado y enviado. Lo capacitan el Don y la misión con la imposición de las manos y la oración consagratoria.
Es presentado y se pregunta a la comunidad si es digno de este ministerio ¿acaso hay hombre sobre la faz de la tierra digno de tal encomienda? Tal vez no encontremos a criatura alguna si se piensa en una dignidad moral suficiente para ponerse delante de Dios y decirle: ¡quiero esto! Se trata de la dignidad de saberse seguidor de Jesucristo, que todo se desprende del bautismo y que dentro de ese bautismo a descubierto la vocación al servicio.
El diaconado no ha sido una iniciativa de él, más bien es iniciativa de Dios y así lo entiende, como un regalo para su plenitud y para ponerlo a disposición de los demás. Se ha convertido en apóstol no por una auto candidatura, ni por encargo humano; ha sido por que el Señor en su misericordia ha fijado su mirada en él y el joven misionero de Mexicali ha respondido con la alegría que siempre lo ha caracterizado.
Semblanza del Padre Jorge Mora
Nació el 28 de septiembre de 1988 en Mexicali, Baja California. Tiene estudios universitarios en Derecho. Entró al candidatado de la Legión de Cristo en Monterrey en el verano del 2009 (Año Sacerdotal). Realizó su noviciado en Alemania, después de su primera profesión religiosa en el 2011, cursó las Humanidades en los E.U. Realizó los estudios de filosofía y teología en Roma.
Realizó sus prácticas apostólicas en Centroamérica viviendo en la comunidad de El Salvador, colaborando en la pastoral juvenil de Guatemala y Costa Rica, además de ser auxiliar de la promoción vocacional.
Actualmente está por iniciar su ministerio en Padua, Italia, como auxiliar de la promoción vocacional, de la capellanía universitaria y la pastoral juvenil.