A las 11 de la mañana de este domingo comenzaba la Santa Misa de ordenación de nuevos presbíteros que don Francisco Cerro Chaves presidía por primera vez como arzobispo de Toledo. Han concelebrado en ella, don Braulio Rodríguez Plaza, arzobispo emérito, don Ángel Rubio Castro, obispo emérito de Segovia, y don Luis Miguel Muñoz Cárdaba, que recibirá la ordenación episcopal el próximo sábado en la catedral primada, tras haber sido nombrado Nuncio del Papa en Sudán y Eritrea. Han concelebrado también el vicario general y el deán del cabildo, así como algunos de los vicarios episcopales, los miembros del cabildo y numerosos sacerdotes.
Los nuevos presbíteros son: Arturo Carmona Cogollo, Sergio Cebrián Fuentes, Rubén Medina Muñoz, Pablo Malina Manzanares, Juan Leonardo Pollicino Martínez, José Javier Sánchez-Vallejo González, José Nazario Vaquero Sepúlveda y Álvaro de Riba Soler, todos diocesanos.
En su homilía, tras saludar a los concelebrantes, don Francisco ha pedido a los nuevos sacerdotes que amen a Cristo, amen a la Iglesia y amen a los pobres. En este sentido, ha afirmado: «Dime cómo amas y te diré cómo evangelizas». Don Francisco ha dicho que estas eran como «tres claves» a través de las cuales «Dios quiere decirnos algo en estos momentos».
Lo primero, ha dicho a los nuevos sacerdotes, «es amar apasionadamente a Jesucristo, porque es el amigo que nunca falla». Para ello hay que dedicar todos los días «un rato largo a la oración». Y «como perdáis de vista a Jesucristo –ha añadido– viviréis vuestro sacerdocio a medio gas. Este es uno de los dramas que tenemos hoy en la Iglesia».
Además, hemos de «amar apasionadamente a la Iglesia, que no os fallará nunca como madre y siempre nos acompañará como madre y maestra y estará siempre a vuestro lado». En este sentido, les ha invitado a amar «al sucesor de Pedro, el Papa Francisco, a vuestro obispo, al presbiterio, a vuestras parroquias».
Por último, les ha invitado también a amar apasionadamente a los pobres: «No olvidéis –les ha dicho– nunca vuestras raíces humildes, no traicionéis a los pobres». Y les ha recordado que pobre, «como decía la madre Teresa de Calcuta, es toda persona carente de amor».
«Es pobre el que no ha encontrado a Jesucristo, el que no llega a fin de mes, el que tiene dificultades en su vida y aquel a quien le falta de todo. Es pobre el que ha perdido el sentido de la vida, el que vive en las periferias existenciales o en las periferias geográficas», ha añadido.
Además, este sábado don Francisco presidió también la santa misa en la catedral en la que ordenó a cuatro nuevos diáconos: Roberto del Cerro Aguado, Marcos Luchara Jiménez, Esteban López Larraechea y Felipe Alberto Vergara Vía. Este año la ordenación de presbíteros y diáconos se ha celebrado por separado y con limitación de aforo para poder garantizar las necesarias medidas de seguridad.
Con información de: ABC