México y Noruega anunciaron que las partes han entrado a la recta final para el diálogo entre la oposición venezolana y el Gobierno de Nicolás Maduro, previsto a iniciar este viernes. La oposición intenta garantizar su participación en un proceso de elecciones “libres y transparentes” mientras Maduro pide como eje central que levanten las sanciones y busca legitimidad internacional.
La recta final previo al cara a cara. Sectores de la oposición de Venezuela se alistan para un nuevo diálogo en México con el Gobierno de Nicolás Maduro y con la mediación de Noruega.
Hasta ahora, por parte de la oposición venezolana se ha confirmado la participación del opositor Henrique Capriles, quien forma parte del partido Primero Justicia, PJ, así como Tomás Guanipa, el secretario general de la organización y con quien Capriles ha tenido diferencias. También está convocado el opositor venezolano y exdiputado Stalin González, designado como uno de los representantes para la negociación.
Capriles, quien ya ha participado en diálogos previos, aseguró que este nuevo encuentro incluya a los diferentes sectores y «que genere resultados» para que «no sea otro fracaso más». «Creo que el proceso no debería ser nunca un ‘show’ de televisión ni para los medios de comunicación», agregó.
La oposición de Venezuela llegará a México buscando “condiciones” para participar en un proceso de elecciones en noviembre próximo, así como la libertad de los presos políticos y ayuda humanitaria para el país, sumergido en una profunda crisis económica, agravada por el coronavirus. «Es muy importante que se discutan (temas) económicos, sociales que permitan aliviar la crisis que vive la inmensa mayoría del pueblo», aseguró Capriles.
Por su parte, el Gobierno de Nicolás Maduro busca desbloquear las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos en su contra, el reconocimiento internacional a su Gobierno y «que se incorporen todas las oposiciones».
«Buscar soluciones a la crisis que vive nuestro país es una necesidad que está por encima de todo. El mejor camino es trabajar sobre todos los mecanismos constitucionales. Vamos a México a luchar por espacios de democracia, para que los venezolanos podamos elegir nuestro destino», escribió en Twitter el exdiputado Stalin González.
González aseguró que las elecciones del 21 de noviembre, donde se elegirá a alcaldes, gobernadores de los estados y diputados locales y regionales, son una “oportunidad” para un cambio sustantivo en Venezuela. «Nuestro país requiere que trabajemos de forma coordinada y bien, con respeto y asumiendo todo de manera responsable. Evitemos la política de ‘hechos cumplidos’ o de estrategias superpuestas, por el bien de este proceso», agregó.
Por su parte, Tomás Guanipa, otro de los delegados de la oposición, aseguró que hará «todo el esfuerzo necesario para que este proceso sea útil para la libertad de los venezolanos” y renunció al cargo de «embajador» de Juan Guaidó -autoproclamado presidente interino de Venezuela en 2019- en Colombia.
«Hoy asumimos nuevos retos, que van desde la negociación para lograr una salida a la crisis que hoy vive Venezuela, así como impulsar la lucha por el derecho de los venezolanos a elegir», escribió en su cuenta de Twitter.
El Gobierno venezolano enviará al presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, y el gobernador del estado de Miranda, Héctor Rodríguez.
«Ese diálogo ya tiene un documento»: Maduro
«Les confirmo que la Cancillería noruega nos ha comunicado que las partes que participarán en el diálogo sobre Venezuela han entrado a fase final de sus pláticas exploratorias a fin de iniciar negociaciones en nuestro país», indicó el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México en un mensaje en Twitter.
«Noruega confirma que el Gobierno de Venezuela y la Plataforma Unitaria Venezolana están en la fase final de las charlas exploratorias, con el objetivo de empezar las negociaciones en México facilitadas por Noruega», respondió el Ministerio Noruego de Relaciones Exteriores.
El jueves pasado, el mismo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó la participación del país azteca como sede del encuentro, en un giro sorpresivo tras años de desinterés por la política exterior. El mes pasado también mostró su interés junto al Gobierno de Argentina por participar en una salida diplomática a la crisis política de Nicaragua.
«El Gobierno de México siempre ha impulsado el diálogo entre los propios venezolanos como la única solución a la situación en Venezuela, sin injerencismos y privilegiando la visión humanitaria», dijo Maximiliano Reyes, subsecretario de Relaciones Exteriores para América Latina.
«Ese diálogo ya tiene un documento», aseguró Nicolás Maduro. «Hay siete puntos en la agenda que se están discutiendo y en los próximos días se dará a conocer la fecha y el lugar de la reunión», agregó el mandatario.
Maduro había advertido antes de que requeriría el levantamiento de las sanciones internacionales impuestas a su Gobierno para sentarse a negociar con la oposición. «En la época de Trump teníamos mucha comunicación con la Casa Blanca, con Elliott Abrams, con el Departamento de Estado», recordó Maduro, pero aclaró que «hoy no tenemos ninguna comunicación con el Gobierno de Estados Unidos».
Los últimos esfuerzos de diálogo entre las partes sucedieron en República Dominicana en 2018 y se repitieron en Barbados al año siguiente en 2019 pero no llegaron a ningún acuerdo. Este nuevo diálogo casi ve su fin hace unas semanas con la detención de Freddy Guevara, dirigente del partido Voluntad Popular y cercano a Guaidó. El dirigente de 35 años es acusado por Maduro de mantener vínculos con “grupos extremistas y paramilitares asociados al Gobierno colombiano”.
La oposición de Venezuela tiene en juego su representación política, después de haberse negado a participar en las últimas elecciones por considerarlas fraudulentas.
Con EFE.
