Ayer se registraron 49 casos, el 6 de julio fueron 15. Muchos son importados del territorio birmano. El científico chino que encabeza la lucha contra el virus recibe una tercera dosis de una vacuna diferente. Estudio: Sinovac produce una décima parte de los anticuerpos producidos por Pfizer-BioNTech. En Indonesia y Tailandia murieron de coronavirus trabajadores de la salud vacunados con medicamentos chinos.
Los casos de coronavirus se han más que triplicado en la provincia de Yunnan, en la frontera con Myanmar. La Comisión nacional de salud anunció hoy que ayer se registraron 49 contagios en las localidades fronterizas de Ruili y Longchuan. 41 son ciudadanos chinos que habían regresado al país desde Myanmar y ocho eran casos de origen local. El 6 de julio fueron 15, de los cuales 12 eran ciudadanos birmanos.
En total las autoridades contabilizaron ayer 65 positivos en toda China. Las cifras oficiales son muy bajas en comparación con otros países y sin embargo marcan el nivel más alto desde el 30 de enero, cuando hubo 92.
El de Yunnan es el segundo brote de la variante Delta. El primero se produjo en Guangdong a fines de mayo, lo que obligó a cerrar algunos puertos importantes, con daños significativos para el comercio nacional e internacional.
Zong Guoying, vicegobernador de Yunnan, ha prometido que las autoridades construirán una «fortaleza de acero» para detener la transmisión del virus. Para hacer frente a la propagación de la infección desde Myanmar, el gobierno local ha establecido controles fronterizos estrictos. Soldados chinos patrullan la frontera para evitar el ingreso de migrantes birmanos, potenciales propagadores del coronavirus. El conflicto civil en curso entre los militares golpistas y la oposición armada dificulta la contención de la emergencia pandémica en Myanmar.
El 18 de julio Gao Fu, director de la Oficina de Control y Prevención de Enfermedades de China, afirmó que las vacunas chinas estaban funcionando contra la cepa Delta. Sin embargo, admitió que había recibido una tercera dosis de una vacuna diferente para reforzar la producción de anticuerpos.
En abril Gao provocó un revuelo cuando planteó la hipótesis de administrar diferentes vacunas a un mismo paciente. La mayoría de los observadores interpretaron su afirmación como una admisión pública de la escasa eficacia de las vacunas chinas. Un estudio de la Universidad de Hong Kong, que apareció en Lancet Microbe el 15 de julio, afirma que la Sinovac china genera una décima parte de los anticuerpos producidos por Pfizer-BioNTech.
Hasta ahora, China ha desarrollado cuatro vacunas y es el país que más dosis exporta en el mundo. Sin embargo, las autoridades sanitarias de varios países han denunciado la limitada validez de las vacunas chinas, lo que constituye un serio problema para todos los gobiernos que las han comprado o recibido gratuitamente de Beijing.
Por ejemplo, cientos de trabajadores de la salud tailandeses e indonesios contrajeron covid después de completar la vacunación con medicamentos chinos. Treinta de ellos murieron en Indonesia y dos en Tailandia. Un verdadero golpe para la «diplomacia de las vacunas» de Xi Jinping.
Beijing.
AsiaNews.
