Vinko Puljić, cardenal arzobispo de Sarajevo, en Bosnia, ha usado el sitio web de ‘Maria Eins Punkt Null’ (María 1.0, en contraste con el grupo catofeminista María 2.0) para criticar el movimiento disidente del episcopado alemán.
Un prelado católico que ha sobrevivido a la persecución comunista de la Yugoslavia de Tito y tiene su sede arzobispal en la capital de un país mayoritariamente musulmán con una fuerte presencia ortodoxa, el cardenal Puljić parte de una visión del ‘camino sinodal’ alemán y de la rebeldía del clero germano muy distinta de la que puedan tener éstos y sus feligreses.
De hecho Puljić apenas puede imaginar el episcopado nacional que preside organizando un ‘camino sinodal’ como el alemán, con sus “ideas exóticas” sobre la práctica cristiana, incluyendo el sacerdocio femenino o la abolición del celibato clerical. “La gente exige a Cristo que se adapte a nosotros” y no, como sería natural, al contrario, sentencia Puljić.
El cardenal hace notar que en su archidiócesis, lejos de tentar a los fieles y sacerdotes, “les ofenden y escandalizan”. Naturalmente, la práctica católica en su archidiócesis es inconmensurablemente más saludable que en el caso alemán.
No es poner las cosas fáciles lo que atrae a los fieles a la Iglesia. “No podemos entender una Iglesia en la que el ‘sacrificio’ se ha convertido en una palabra extraña y hay un Cristo sin cruz”, continúa Puljić: “Puede haber discusiones sobre todos los temas, pero basadas en el Evangelio y no en la secularización y el relativismo”.
.
INFOVATICANA.