Para quienes se preguntaban cuándo iba el Vaticano a reaccionar al desafío abierto de la Iglesia alemana a las instrucciones romanas, ya hay una. Pero no, no tiene nada que ver con el cisma amenazado por los obispos empeñados en la rebeldía de su ‘camino sinodal’, sino que Roma envía un visitador a una de las pocas archidiócesis ‘rebeldes contra la rebeldía’, la Colonia del cardenal Rainer Maria Woelki.
En una nota publicada hoy 28 de mayo, la Archidiócesis de Colonia anuncia la llegada de visitadores apostólicos para evaluar “posibles errores” cometidos por su titular, el cardenal Rainer Maria Woelki, en torno a un ya viejo escándalo de abusos sexuales clericales.
Los visitadores apostólicos serán el cardenal Anders Arborelius de Estocolmo y el obispo Johannes van den Hende de Rotterdam, presidente de la Conferencia Episcopal de Países Bajos, informa CNA Deutsch.
“Durante la primera mitad de junio, los enviados de la Santa Sede visitarán la archidiócesis para hacerse con un cuadro global de la compleja situación pastoral de la archidiócesis”, se afirma en la nota, que añade que los visitadores examinarán, asimismo, posibles errores cometidos por el arzobispo Stefan Hessee of Hamburgo, que oficiara de vicario general en Colonia entre 2012 y 2015, y los obispos auxiliares Dominikus Schwaderlapp y Ansgar Puff.
Hesse declaró en marzo que había ofrecido su renuncia al Papa Francisco, solicitando la “liberación inmediata” de todas sus obligaciones.
Woelki acoge la visitación apostólica recordando que “ya en febrero informé al Santo Padre en Roma ampliamente sobre la situación en nuestra archidiócesis. Celebro que con esta visitación apostólica el Papa quiera obtener su propia impresión de la investigación independiente y sus consecuencias”.
El cardenal anunció en diciembre del año pasado que había pedido a Francisco que revisara las decisión que adoptó en 2015 con respecto al sacerdote acusado, identificado como ‘Padre O’.
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