La amenaza se ha hecho realidad. El gobierno ha asaltado el poder judicial. A partir de ahora no podrán realizar nombramientos si se encuentran en funciones. Sólo les queda la facultad disciplinaria, prácticamente virgen. Una vez ‘castrado’ el poder judicial, la presión para su renovación se multiplica de manera que los ‘populares’ puedan aceptar barco como animal de compañía…
Lo llamativo es que este obús contra la independencia del poder judicial y la calidad de nuestra democracia haya pasado tan desapercibido. Ni una mención en la prensa. Ni una critica de las asociaciones judiciales. Ni una voz de la oposición. Ni un anuncio de recurso de inconstitucionalidad. Ni una queja de Bruselas. Quizás sea la anestesia de la pandemia. Pero que algo tan grave para nuestro sistema de convivencia pase tan de puntillas es un grave síntoma de una enfermedad peor que el covid: las infinitas tragaderas.
Es verdad que estamos en Semana Santa y que el país está políticamente medio congelado y socialmente confinado. Pero cuando Suárez legalizó el Partido Comunista un Viernes Santo hubo sangre en las venas. Hoy violan la independencia judicial un lunes santo y parece que tenemos horchata… ¿Envejecimiento poblacional?
También es verdad que el CGPJ emitió en su día un informe en el que censuraba la reforma de manera unánime, incluídos los jueces nombrados a propuesta del PSOE. También es verdad que la Comisión Europea sacó la tarjeta amarilla hace meses ante la posibilidad de este ataque a nuestra calidad democrática. Pero hoy todos guardan un preocupante silencio procesional. Como si acompañaran fúnebremente el cadáver de nuestra democracia…
Tampoco el PP ha anunciado un recurso de inconstitucionalidad. Quiźás Casado esté preocupado en que Vox no le coma la merienda y evitar su entrada en el ejecutivo madrileño. Los ‘verdes’ de Vox tampoco parecen especialmente ágiles, focalizando sus esfuerzos en no descender de la racha alcista que les acompaña los dos últimos años. Y los ‘regeneradores’ de Ciudadanos tampoco levantan la voz tratando de sobrevivir tras haber pactado con Podemos -línea roja- en la moción del Ayuntamiento de Murcia. ¿Queda alguien ahí?
La reforma se tramitó además como proposición de ley en lugar de como proyecto de ley evitando las ‘incómodas’ consultas a Consejo de Estado y CGPJ. Tampoco se consultó a la Comisión de Venecia, como exigía la Comisión Europa. Y -además- se tramita en plena pandemia, con las libertades restringidas. Lo mismo da ocho que ochenta…
Y el asalto a la Justicia se produce tras el asalto a la Abogacía del Estadio y a la Fiscalía General del Estado y el ninguneo del Consejo de Estado. Toda una ‘patada en la puerta’ institucional… ¿Despertaremos?
El anzuelo del pescador
- La Justicia restituirá a Pérez de los Cobos. La Justicia dará la razón a Pérez de los Cobos en su discreción sobre las investigaciones judiciales y obligará a Marlaska a restituirle. Quizás por este tipo de desautorizaciones el gobierno quiere meter mano a la Justicia…
- Estados Unidos afea al gobierno su ataque a la prensa. Argumenta que pone en riesgo la libertad de expresión. Los socialcomunistas nunca han entendido eso de la libertad porque su ADN es totalitario: o conmigo (aunque sea subvencionado) o contra mi.
- La policía, contra Podemos. Justo cuando Iglesias abandona la vicepresidencia, la UDEF concluye que no existen evidencias del trabajo de Neurona para Podemos. Quien se fue a Sevilla…
- Calviño mandará sobre Yolanda. Calviño ostentará el mando único económico. O sea, seguirá presidiendo la Comisión de Asuntos Económicos y será la ‘jefa’ de Yolanda Díaz. Es decir, no habrá reforma laboral que no sea aprobada por Calviño.
