El Congreso de los Diputados aprobó este jueves la Ley de la Eutanasia por 202 votos a favor y 144 en contra. Entrará en vigor en tres meses, tiempo ofrecido a las CCAA para que implanten los comités de seguimiento establecidos en la ley. Podemos, ciudadanos y PSOE aplauden con un entusiasmo digno de mejor causa. PP y Vox anunciaron que llevarán la Ley al Tribunal Constitucional.
La ley se aprueba sin diálogo social y de forma exprés. ¿Qué miedo le tienen al diálogo?, ¿por qué no escuchar a los médicos paliativistas que están en la “primera línea” de la muerte?, ¿por qué no escuchar a los enfermos terminales a los que supuestamente va dirigida la ley? Resulta que muchos enfermos terminales retorcidos por el dolor y el abandono reclaman la muerte. Pero en cuanto el dolor es tratado y se sienten acogidos, pelean por vivir.
En España hay 50.000 enfermos sin acceso a cuidados paliativos. No hay inversión en paliativos, pero ahora les ofrecerán el atajo, la muerte rápida. Más camas liberadas. Menos gastos sanitario. Un recorte disfrazado de compasión. Un alivio para las cuentas públicas. En definitiva: un ‘descarte’ en toda regla para los que no son “productivos” y sólo producen coste… ¡Un paso al frente de la deshumanización!
Seguimos los criterios de quien fuera presidente del FMI, Christine Lagarde, que afirmaba que el envejecimiento poblacional era un problema para la salud de las cuentas públicas. Más descarnado fue el actual presidente argentino, Alberto Fernández, al afirmar que el envejecimiento tensionaba el gasto sanitario y el equilibrio de las cuentas. Y ahí está España, uno de los cinco países del mundo en legalizar el suicidio asistido por licenciados en Medicina… ¿Quién reconstruirá ahora la confianza médico-paciente?
Paradójicamente la ley se aprueba en medio del debate sobre los escasos medios para tratar la salud mental y el recurso ampliamente generalizado a los ansiolíticos. Es decir, reconocemos que tenemos un problema y en lugar de afrontarlo, recurrimos a la solución facilona… e indigna.
La Ley se aprueba -además- en pleno estado de alarma, con las libertades restringidas, cuando supuestamente el Congreso debería centrarse en asuntos de mero trámite y en combatir eficazmente la pandemia. Y para mayor paradoja, se aprueba en plena crisis del covid que ha segado 100.000 vidas, la mayoría de ellos, mayores. ¿No habíamos quedado en que no hay que contraponer salud con economía?
El 18 de marzo de 2021 será recordado como el día de la indignidad. Porque la dignidad social se mide por la forma con que tratamos a los más débiles. El día negro en que tiramos la toalla como sociedad, el día triste en que renunciamos a nuestra humanidad para apostar por un “sálvese quien pueda”.
El anzuelo del pescador
- Casado en Murcia. Casado acude a la fallida moción de censura murciana para hacerse la foto de “la reconstrucción del centro-derecha”. Pero lo hace rindiendo honores a los tránsfugas de Ciudadanos, sin la discreción del ‘tamayazo’. Una foto que ha incomodado a algunos barones.
- Vox asumirá Educación en Murcia. Los diputados murcianos expulsados de Vox han jugado a hacerse querer por el PSOE para negociar con el PP la consejería de Educación para implantar el pin parental. Un éxito para el derecho de los padres a educar a sus hijos que los de Vox se empeñan en no anotarse a pesar de que la izquierda echa las muelas con que los antiguos candidatos de Abascal entren en gobierno y asuman una cartera social tan relevante para empoderar a los padres. ¡Qué oportunidad perdida!
- Edmundo y la traca final. Arrimadas ha optado finalmente por echar toda la carne en el asador madrileño. Sin primarias algunas, retira a Ignacio Aguado y nombra candidato a Edmundo Bal, su mejor activo y uno de los pocos fieles que le quedan. Es el ‘todo o nada’. Si pierde la apuesta no estará muerta sino enterrada.
- Mañueco, en un hilo. El PSOE redobla sus acercamientos a Ciudadanos en Castilla y León para jubilar a Mañueco, del PP. Arrimadas dice que ha dado órdenes de rechazar, pero también reconoce que no controla el partido. El PP puede haber salvado Murcia pero puede perder su feudo histórico.
Plus Ultra, a Luxemburgo. El rescate español a la compañía aérea venezolana se examinará en el Tribunal de Justicia de la UE con sede en Luxemburgo. Ryanair recurrirá el rescate español a una compañía con presencia marginal en España. Al final, el chavismo en el gobierno español se dirimirá en Luxemburgo por recurso de compañía irlandesa. Nadie es profeta en su tierra.
