Luego de tres semanas de permanecer internado, a causa de complicaciones derivadas del Covid-19, el presbítero José Huriel Mejía Cortés dejó de existir, la tarde de este miércoles, mientras se encontraba internado en el Hospital Miguel Hidalgo de esta ciudad.
El sacerdote, quien desempeñaba su ministerio en la parroquia de El Buen Pastor, ubicada en el fraccionamiento Rodolfo Landeros Gallegos, al oriente de la ciudad y se convierte en el primer religioso en sucumbir a la pandemia en territorio de Aguascalientes, de entre los 50 que han resultado positivos a la portación de la enfermedad.
Por otra parte, el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, José María de la Torre Martín, se encuentra en un estado general calificado como muy grave, pero con mejorías en signos vitales, que permiten mantener la esperanza en su recuperación.
De manera oficial, el vocero del Obispado, Rogelio Pedroza González, reportó este martes que el estado de salud del prelado es muy grave y permanece intubado con hemodiálisis.
Adicionalmente, le fue realizada una escisión en la tráquea para permitir un mejor paso de aire, sin que ello signifique que haya empeorado su capacidad respiratoria, sino solamente que se busca una mejor vía para el paso de oxígeno suministrado a través de un ventilador mecánico.
Como se dio a conocer en su oportunidad, el obispo José María de la Torre Martín presentó, el pasado 5 de noviembre, una fuerte neumonía, agravada por la portación del SARS-coV-2, que le obligó a ingresar a un hospital privado del norte de la ciudad. Al siguiente día fue llevado en ambulancia al Hospital Hidalgo, donde, el domingo 8 del presente mes, los médicos que le atienden, consideraron necesario intubarlo, ante el daño pulmonar que presentaba.
El vocero del obispado negó que se tenga algún indicio del sitio o momento en donde De la Torre Martín resultó contagiado, toda vez que en estos momentos el virus que causa el Covid-19 circula de manera muy profusa no solo por todo el estado o el país, sino en el mundo entero y se encuentra en miles de personas y superficies.
Por separado, el secretario de Salud estatal, Miguel Ángel Piza Jiménez, calificó el estado de salud del jefe de la Iglesia Católica en Aguascalientes como “grave pero estable”.
En el mismo sentido, personal médico a cargo de su atención, reporta que, durante el fin de semana, el obispo diocesano mostró una muy leve mejoría en su capacidad respiratoria y no se descarta aún que en pocos días se pueda retirar el tubo, si no se presentan más complicaciones.
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Días internado cumple, este miércoles, el obispo José María de la Torre
Con información de El Sol de Centro/Mario Luis Ramos
