* En junio, los colores del arcoíris de la ideología LGBTQ+ se perciben por todo el Reino Unido.
«Pocos ingleses saben que junio está dedicado al Sagrado Corazón de Jesús, pero todos saben que reina el demonio de la promiscuidad sexual», afirma Edward Pentin, corresponsal europeo.
Añade que el “Mes del Orgullo” LGBTQ que se celebra en el Reino Unido muestra “ hasta qué punto nuestro país se ha distanciado de sus raíces cristianas”.
Señaló que las marchas festivas que celebran el pecado y el hedonismo, en lugar de los sacramentos, se han vuelto comunes en todo el Reino Unido, al igual que los símbolos omnipresentes de apoyo al movimiento LGBTQ. Están presentes en todo, desde las cadenas de supermercados hasta las sedes de los servicios de inteligencia británicos, pasando por el Museo Británico, e incluso en el postre «crumble» que se sirve en la Cámara de los Lores: la bandera arcoíris del Orgullo ondea con orgullo en casi todas partes.
El fin de semana pasado, para conmemorar el “Desfile del Orgullo” de la ciudad, The King’s School, Canterbury (una de las escuelas más antiguas que aún siguen en funcionamiento en el mundo, fundada en 597 por San Agustín de Canterbury durante su viaje misionero para convertir a Inglaterra) izó la bandera arcoíris por segundo año consecutivo en los edificios históricos adyacentes a la catedral local. Anuncio
El año pasado, sus alumnos decoraron cupcakes con temática del orgullo, celebraron una fiesta del orgullo y proyectaron una película biográfica sobre Freddie Mercury, el ícono gay que murió de sida. El impulso para este orgullo omnipresente fue el nombramiento de una directora lesbiana, cuya pareja también enseña en King’s.
Pero el famoso Eton College –la escuela privada más distinguida de Inglaterra– también celebra el Mes del Orgullo y otras tendencias modernistas en nombre de la “igualdad y la inclusión”, y su director se autodenomina orgullosamente “woke” (despierto).
“Semejante promoción del libertinaje y la desvergüenza en instituciones que antaño eran consideradas de la más alta estima habría sido impensable hace dos décadas”, dijo el padre Gavin Ashenden, un converso católico, teólogo y comentarista que fue alumno de la King’s School en la década de 1970.
Considera estos cambios como una manifestación de «un nuevo movimiento político totalitario cuyo objetivo es erradicar el cristianismo». Está seguro de que «quienes han optado por enarbolar la bandera del Orgullo creen defender una causa justa, pero su moralidad conscientemente pretende reemplazar el cristianismo presente aquí desde 597 por un nuevo paganismo que exalta el hedonismo y las divisiones identitarias». Según el exanglicano, esto es «psicosis de grupo e impotencia intelectual».Anuncio
El cofundador del podcast Catholic Unscripted cree que la King’s School, «profundamente arraigada en la tradición cristiana», ha caído en la trampa del «colectivismo neopagano», lo que considera una tragedia personal.
El año pasado, se celebraron dos escandalosas «discotecas silenciosas» en la histórica Catedral anglicana de Canterbury .
La primera tuvo lugar el 3 de febrero de 2024 y causó indignación;
sin embargo, el 15 de agosto, festividad de la Asunción de María, también fue aprobada por el deán anglicano local, un hombre abiertamente gay que vive con su pareja.
Canterbury —la capital católica primordial de Inglaterra desde finales del siglo VI hasta la Reforma— y la propia ciudad están experimentando un claro declive de la fe . Esto ya lo observaron durante sus visitas a las Islas Británicas Juan Pablo II y Benedicto XVI, quienes advirtieron que Inglaterra no abandonara sus raíces cristianas.
Tras este comentario bastante pesimista, el autor del artículo, paradójicamente, ve señales de un «despertar católico» en Gran Bretaña. Le reconforta, entre otras cosas, que, aunque «las banderas arcoíris siguen presentes, hay menos que el año pasado».
Además, esta semana los dominicos ingleses informaron de un número récord de novicios, tantos que piden donaciones para apoyar su formación. «Este será nuestro mayor número de novicios en 30 años», dijo el padre Thomas Crean. Nos recordó que «la Iglesia está creciendo, y si está menguando, vale la pena buscar las razones», y añadió: «Quizás el aumento de vocaciones confirme el principio de San Pablo: donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia».
En un artículo para el Catholic Herald, el padre Ashenden propuso una renovada devoción al Sagrado Corazón como contramedida y antídoto contra la creación de una sociedad sin Dios. Explicó que
“El amor verdadero desafía el desorden, el perdón desafía la furia, el propósito de la creación desafía la coerción colectiva y el llamado al Cielo trasciende la violencia planificada de la obediencia forzada”.
Un ex obispo anglicano y confesor de la reina Isabel II recordó que «el paganismo ya ha caído a los pies del Sagrado Corazón, salvando a nuestros antepasados ». En su opinión, «si los católicos regresan a esta devoción, el paganismo volverá a caer».
LONDRES, INGLATERRA.
SÁBADO 14 DE JUNIO DE 2025.
KAI.
