Seton Hall Hillel, la organización estudiantil judía de la Universidad Católica Seton Hall en Nueva Jersey, organizó una actuación de drag queen para ayer martes 8 de abril como parte de sus actividades en el campus. Un grupo de estudiantes católicos anunció un rosario de reparación ese mismo día.
La Universidad Seton Hall, ubicada en el estado de Nueva Jersey (Estados Unidos), fue expresamente escogida para un evento drag llamado “Drag Bingo”, con la participación de un travesti, un hombre vestido de mujer actuando bajo el nombre de “Hanukkah Lewinsky”. Los organizadores judíos también invitaron a los estudiantes a asistir vestidos con ropa del sexo opuesto al suyo.
Aunque fue promocionado como el “mayor evento del año” por la propia organización, Hillel evitó publicitar la convocatoria en sus redes sociales, limitándose a difundirla a través del portal oficial de eventos estudiantiles de la universidad. La página del evento, inicialmente de acceso abierto, ahora requiere credenciales universitarias para verla.
El grupo Hillel realizó previamente un evento similar el 12 de marzo, también anunciado por el capítulo de Hillel de la región Greater MetroWest (Nueva Jersey). Luego animaron a los estudiantes a “salir a pasar el rato” con el artista mencionado.
La identidad «católica» de la universidad está siendo menospreciada
La organización de este tipo de actividades ha despertado el descontento entre algunos estudiantes, quienes señalan que tales iniciativas entran en conflicto con la identidad católica de su universidad.
La política de Seton Hall requiere que todas las reservas de espacio realizadas por organizaciones estudiantiles sean aprobadas por el Departamento de Participación Estudiantil y que todas las invitaciones a invitados externos, como artistas o oradores, sean aprobadas previamente por la Oficina del Decano de Estudiantes y la Oficina de Desarrollo de Liderazgo.
Este reglamento también recuerda a los grupos estudiantiles que deben actuar “teniendo presentes la misión y los valores de la Universidad”.
Un rosario de reparación
Ante esta situación, un grupo de estudiantes católicos organizó un rosario de reparación frente al edificio escogido para la realización del Drag Bingo. Uno de los iniciadores de la oración lamenta lo que llama «la infiltración de la agenda LGBT en las instituciones católicas» y pide a Seton Hall que restaure su identidad denominacional.
La universidad en manos de la subversión
Fundada en 1856, Seton Hall es una de las universidades diocesanas más antiguas del país y está directamente afiliada a la Arquidiócesis de Newark, actualmente dirigida por el Cardenal pro LGBTIQ Joseph Tobin.
- La institución ya ha sido objeto de polémica en el pasado por haber introducido en su currículo contenidos que apoyan la ideología de género.
- En 2018, se ofreció un curso llamado “La política del matrimonio”, centrado en el “matrimonio entre personas del mismo sexo” y destacando voces “históricamente marginadas”, como las de las mujeres y las personas queer.
- Los círculos católicos también han criticado el tipo de música que se transmite en la estación de radio oficial de la universidad, WSOU, que repetidamente ha presentado contenido considerado satánico o blasfemo.
B’nai B’rith, rabino transgénero, promueve la agenda LGBTQ y el aborto
Por su parte, la asociación de estudiantes judíos Hillel ya ha promovido otros eventos relacionados con la comunidad LGBTQ en la universidad.
- En 2022, la misma organización invitó a una rabina transgénero, Abby Stein, a una cena en el campus. Hillel Greater MetroWest NJ también ha apoyado las actividades del Mes del Orgullo y aboga activamente por la inclusión de estudiantes LGBTQ, el aborto y la ideología de género.
- Hillel International , la organización matriz de B’nai B’rith , opera en más de 850 campus en universidades de todo el mundo. La organización también colabora con grupos feministas y proaborto como el Consejo Nacional de Mujeres Judías.
- Hillel también es parte de la coalición Thrive, que promueve el activismo LGBTQ entre los jóvenes judíos y defiende públicamente a los judíos queer. La organización ha sido criticada incluso dentro del judaísmo.
Matthew Berger, gerente de comunicaciones estratégicas de Hillel, afirmó: «Estamos orgullosos de nuestro compromiso con la comunidad LGBTQ. Celebramos la diversidad de cada estudiante y brindamos espacios donde pueden conectar simultáneamente con su identidad judía y su identidad sexual o de género».
Es absolutamente inconcebible que una organización tan subversiva pueda actuar a su antojo en una universidad que se dice católica.
Por PIERRE-ALAIN DEPRAUW.
NEW JERSEY, EU.
MEDIASPRESSE,
