El pacto presupuestario del PSOE con Bildu es un acto infame que traspasa muchas líneas rojas democráticas, y deberíamos reaccionar en consecuencia.
El Gobierno de España sella sus presupuestos con un grupo que hace homenajes a terroristas
La infamia del PSOE: vota junto a Bildu legalizar el ultraje a España y la apología del terrorismo
Ya es hora de que muchos caigan de la burra en lo que al PSOE respecta, empezando por el Partido Popular y Ciudadanos, que con tanta frecuencia intentan llegar a acuerdos con el PSOE mientras tratan con desdén a Vox, un partido que no pacta ni con los herederos de ETA, ni con comunistas ni con golpistas. Ese pacto sangriento -porque lo han suscrito sin ningún respeto por la sangre de las víctimas- deja las siguientes evidencias:
1. Para el PSOE ser izquierdista es más importante que ser demócrata
Los socialistas llevan muchos años demostrando esto. Su pacto con un partido antidemocrático como Bildu lo deja en evidencia una vez más. Con ese pacto, el PSOE demuestra que antepone ser de izquierdas, aunque seas un totalitario y apoyes a terroristas, a ser demócrata. Si fuese de otra forma, el PSOE tendría menos problemas en buscar acuerdos con el PP, con Cs y con Vox que en buscarlos con los herederos políticos de ETA.
2. Para el PSOE es peor discrepar de la izquierda que apoyar a ETA
Esto lo ha demostrado en los últimos meses. El PSOE ha mentido una y otra vez llamando “fascista” a Vox, un partido democrático y pacífico cuyo “delito”, a los ojos de la izquierda, es atreverse a discrepar de los dogmas ideológicos del pensamiento único progre. Sin embargo, ese mismo PSOE no tiene problemas en juntarse con un partido filoterrorista y violento, pero de izquierdas. De esta forma, el PSOE demuestra que considera más censurable discrepar de la izquierda que apoyar a los terroristas de ETA, negarse a condenar sus crímenes y homenajear a los terroristas presos.
3. El PSOE no es un partido constitucionalista: ha vuelto a la extrema izquierda
Esto es algo que tienen que entender PP y Cs de una vez por todas. El PSOE ya no está con la defensa de la Constitución: busca acuerdos de forma preferente con quienes no la acatan, con quienes han apoyado un golpe separatista para suspender su vigencia en Cataluña, con quienes pisotean derechos constitucionales -como hace el propio PSOE con la libertad de educación- y con quienes quieren romper la unidad de España, que es la base sobre la que se fundamenta nuestra Constitución. Digan lo que digan la izquierda y sus voceros mediáticos, Vox sí que es un partido constitucionalista: el PSOE ya no lo es. Ha vuelto a la extrema izquierda de la que surgió. Si el PP y Cs quieren hacer un cordón sanitario, háganselo al PSOE -que se codea con totalitarios y proetarras- y no a Vox.
4. Bildu quiere «tumbar el régimen»: el PSOE también
“Nosotros vamos a Madrid a tumbar definitivamente el régimen”: lo dijo ayer Bildu en el Parlamento Vasco tras haber anunciado su apoyo a los presupuestos del PSOE y de Podemos. Con esa declaración, Bildu deja claro que si simpatiza con esos presupuestos es porque ven en ellos la posibilidad de subvertir nuestro marco constitucional. Ha sido el PSOE el que ha diseñado esos presupuestos al gusto de proetarras, golpistas y comunistas, y eso es porque el PSOE de Pedro Sánchez también quiere tumbar el régimen, y estos presupuestos manchados con la sangre de las víctimas de ETA son un paso para ello.
Cualquier búsqueda de un acuerdo con el PSOE o cualquier apoyo a ese partido sólo sirve para alentar ese plan de derribo de nuestro pacto constitucional. ¿Se han enterado ya Pablo Casado o Inés Arrimadas, o sus tragaderas aún son capaces de colar más infamias?
Con información de Contado estrelas