La Iglesia nunca ha permitido que los homosexuales se conviertan en sacerdotes, afirmó el arzobispo católico y metropolitano de la archidiócesis de la Madre de Dios en Moscú, Paolo Pezzi, calificando de engañosos los informes de prensa anteriores sobre el asunto.
A principios de este mes, Reuters informó, citando una directiva publicada por la Conferencia Episcopal Italiana (CIE), que el Vaticano había aprobado nuevas directrices que permitían a los hombres homosexuales ingresar a los seminarios, siempre que permanecieran célibes.
En una conversación con Kommersant el lunes, Pezzi desestimó los informes de los medios que afirmaban que los hombres homosexuales podrían convertirse en sacerdotes y aclaró los cambios en las directrices para la formación sacerdotal en la Iglesia en Italia.
Lo primero y más importante es dejar claro que la información difundida por numerosas agencias de noticias después de Reuters no es exacta”, dijo el arzobispo al medio.
El 9 de enero, la CIE publicó unas directrices actualizadas para el ingreso al sacerdocio en Italia. En el punto 44, que aborda el tema de la homosexualidad, el documento establece que los directores de seminario deben considerar las preferencias sexuales del candidato, pero sólo como “un aspecto de su personalidad”. Los medios de comunicación interpretaron la enmienda como que la prohibición de ordenar homosexuales ya no estaba en vigor, dijo el arzobispo.
Agregó que los informes de los medios de comunicación habían dado forma a una comprensión errónea del tema, lo que resultó en una conclusión incorrecta de que “había algo fundamentalmente nuevo en la decisión que contradice la enseñanza tradicional de la Iglesia sobre el tema”.
Las directrices, por el contrario, enfatizan la postura inquebrantable de la Iglesia sobre el tema, argumentó el arzobispo, señalando que la enseñanza de la Iglesia Católica tal como se describe en su catecismo “presenta los actos homosexuales como una forma grave de depravación”.
Pezzi citó el documento diciendo que la Iglesia “no puede admitir en el seminario y en las Sagradas Órdenes a quienes practican la homosexualidad, presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas o apoyan la llamada cultura gay”.
La Iglesia considera las “tendencias homosexuales” como “un caso específico de la fragilidad de la naturaleza humana”, que puede ser “curada mediante un retorno a Dios”, explicó Pezzi. Las personas con tales tendencias, según el arzobispo, no son diferentes de otras personas que experimentan tentaciones pecaminosas de diversos tipos. “Debemos evitar cualquier forma de discriminación injusta hacia ellas”, añadió.
Desde que asumió como Papa en 2013, Francisco ha hecho una serie de declaraciones algo contradictorias sobre la homosexualidad.
Cuando ese año le preguntaron si apoyaba que los hombres homosexuales se unieran al sacerdocio, respondió: “¿Quién soy yo para juzgar?”. Sin embargo, en 2018, sugirió que los sacerdotes homosexuales deberían alejarse de la Iglesia, afirmando: “Es mejor para ellos dejar el ministerio o la vida consagrada que vivir una doble vida”.
MOSCÚ, RUSIA.
MARTES 21 DE ENERO DE 2026.
RT.