El controvertido sacerdote Javier Belda reaparece en México como delegado pontificio de una Asociación Civil

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El sacerdote de origen murciano, Javier Belda Iniesta, ha reaparecido en público en México en la presentación de la aplicación Memorial Papa Francisco.

Se trata de una aplicación que busca «fomentar una comunión digital auténtica, en la que los vivos, mediante sus oraciones, recuerdos y homenajes, encuentran a sus difuntos, y con ellos renuevan aquellos vínculos de una comunión que ni siquiera la muerte ha logrado quebrantar».

Esta aplicación nace bajo el paraguas de la Asociación Civil “Memorial Papa Francisco”, constituida en el territorio de la archidiócesis Primada de México por expresa voluntad del Papa Francisco. Según la descripción que ofrece la propia web, está «inspirada por la trascendencia de preservar el legado y el tributo a la memoria de cuantos han formado parte de nuestra vida, tiene como objetivo primordial llevar a cabo acciones concretas que se encaminen al mejoramiento de las condiciones de vida, al fomento del bienestar y a la promoción de una subsistencia digna de personas mayores que se hallen en condiciones de desatención, fragilidad y precariedad».

Lo más sorprendente de todo, es que el nombre del sacerdote Javier Belda Iniesta vuelve a estar vinculado a negocios eclesiales: las fundaciones.

En la rueda de prensa de presentación de esta aplicación, Javier Belda intervino en calidad de delegado pontíficio del Memorial del Papa. Belda, salpicado por varios escándalos relacionados con Fundaciones en Madrid, explicó que “el costo es aproximadamente, no llega 600 pesos anual el plan familiar, quiero decir que es una persona que se suscribe y tiene 15 memoriales, y todos su familiares, y todos los que vayan a utilizar esos memoriales son gratuitos, y luego el Plan Solidario, que se tiene entorno a unos mil 200, si alguien desea, pues quien no tenga recursos pues desea financiarles el memorial o los memoriales a las personas sin recursos”.

Según Belda, la aplicación se basa en el interés del pontífice de aliviar la soledad de los ancianos: “A partir de ahí nos dijo ¿no podemos hacer algo para ayudar a los ancianos, para ayudarlos a que puedan estar mejor, que vivan mejor, a los más vulnerables y al mismo tiempo que todo aquello que nos han entregado se pueda conservar? Y que llegue a una sociedad más tecnológica”.

Por ello, continúo el delegado papal, se les ocurrió crear un proyecto para conservar la memoria que los han precedido, de ahí que se desarrolló la App que tiene la intención de tener un espacio para compartir, para “enriquecer cualquier recuerdo especial”, y que todo lo recaudado por ella: “Que todo esto fuera dedicado, unica y exclusivamente al cuidado de los ancianos, de los más vulnerables. Si éramos capaces de crear una plataforma, un proyecto, una estructura, que pudiera generar algún tipo de recurso fuera directamente destinado, única y exclusivamente al cuidado de los ancianos”.

Javier Belda señaló que la plataforma funcionará a través de una suscripción, calculada para que cualquier interesado tenga acceso, y que será “en torno a 10 pesos semanales, lo que costaría una suscripción única”. Medios en México ya presentan esta aplicación como la app «que cobrará por recordar a los difuntos».

¿Quién es Javier Belda?

A pesar de los notables escándalos en los que se ha visto envuelto este sacerdote, abogado del obispo Zanchetta, el Vaticano sigue confiando en él para operaciones de este tipo. Como ya les contamos en este medio hace un tiempo, Belda es un protegido de Peña Parra, secretario de Estado del Vaticano.

Javier Belda llegó a la archidiócesis de Madrid por petición de Osoro a Edgar Peña Parra para resolver el lío de las fundaciones que salpicaba al propio Osoro.

En el año 2021, Belda fue denunciado por falsedad documental, fraude a Hacienda pública e intrusismo laboral, motivo por el cual fue apartado como profesor de la UCAM.

InfoVaticana también destapó que Javier Belda facturó más de 800.000 euros a través de una empresa suya a la Fundación Fusara que él mismo investigaba.

La empresa que defiendía a la Fundación era una empresa cuyo dueño es el sacerdote Javier Belda, quien aparece como administrador único de CMC THEO LEGAL SL.

Según el informe al cual tuvo acceso InfoVaticana, la empresa de Javier Belda, a quién Osoro dio el encargo de investigar lo que ocurría con estas fundaciones, habría facturado 860.310 €, IVA Incluido bajo el concepto “honorarios por los trabajos realizados a la fundación Santamarca y San Ramón y San Antonio (Fusara) en el procedimiento (diligencias previas 2059/2019) que se sigue en el juzgado de instrucción número 28 de Madrid, conforme al apartado primero de la hoja de encargo.

Además, hay que recordar que el propio cardenal Osoro propuso a Javier Belda como patrono de dicha fundación.

Javier Belda también fue el encargado de defender al obispo abusador Gustavo Zanchetta, que fue condenado a más de cuatro años de cárcel. Tras conocerse la sentencia, Javier Belda, abogado canónico de Zanchetta declaró que «evidentemente respetamos las decisiones judiciales, pero no la compartimos porque consideramos que no solo no hay pruebas sino que los hechos no sucedieron y además consideramos que hay una serie de contradicciones de los testigos».

Belda también tuvo un papel protagonista en 2022 cuando el Papa Francisco le envió a Salta para mediar en el conflicto entre el arzobispo argentino de Salta, Mario Antonio Cargnello, y las Monjas Carmelitas Descalzas de Salta encargadas del monasterio de San Bernardo.

¿Es Javier Belda la persona indicada para estar metida en una Asociación pontificia a pesar de todos los escándalos que le salpican?

¿Nadie de Roma se atreve a preguntarle al obispo de Cartagena sobre lo que se cuenta de él por allí?

¿Nadie va a investigar en el Vaticano si Belda se ha llenado los bolsillas a costa de las fundaciones de la archidiócesis de Madrid?

MARTES 29 DE OCTUBRE DE 2024.INFO

VATICANA.

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