Los obispos traicionan su misión divina al no predicar la fe católica, declaró el cardenal Gerhard Müller en una conferencia celebrada un día antes de la peregrinación «Summorum Pontificum» del rito romano a Roma, que tendrá lugar mañana.
Müller sabe que el poder de la política, los medios de comunicación y los bancos es, en términos seculares, «el lado seguro». La verdad, en cambio, desafía la contradicción y promete el sufrimiento con Cristo. Müller también señaló dos graves errores:
1. Creer que un Papa con su máxima autoridad apostólica (plenitudo potestatis) puede incluso llegar a cambiar la constitución jerárquica de la Iglesia y su ley divina (ius divinum), por ejemplo delegando su jurisdicción en los laicos.
2. Creer que el Espíritu Santo pueda inspirar al Papa una doctrina totalmente nueva que los fieles deben aceptar ciegamente, aunque esté en abierta contradicción con la clara enseñanza de las Sagradas Escrituras, con la Tradición Apostólica y con las anteriores definiciones dogmáticas de los Papas y los Concilios Ecuménicos.
VIERNES 25 DE OCTUBRE DE 2024.
CIUDAD DEL VATICANO.
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