*El gobierno británico firmará una ley que introducirá una multa por cualquier gesto de oposición a las actividades de un centro de abortos. No sólo será castigado repartir folletos o intentar hablar, sino incluso rezar en silencio cerca del edificio.
En Gran Bretaña, más de 200.000 niños no nacidos pierden la vida cada año debido al aborto. Mientras tanto, la nueva ley prohíbe incluso la oración silenciosa a menos de 150 metros de un centro que brinde servicios de aborto.
Los socialdemócratas en el gobierno, llamados también «laboristas», rechazaron una propuesta del gobierno anterior que sugería que se permitiría la oración silenciosa en nuevas «zonas de acceso seguro».
El gobierno actual ha eliminado las excepciones que permitían la comunicación «voluntaria» dentro de la zona de amortiguamiento porque se interpretó que esta propuesta permitía a los opositores al aborto entablar conversaciones con la gente o repartir folletos.
Según la nueva ley, cualquier acción que pueda influir en la decisión de una persona de utilizar los servicios de aborto, es ilegal.
Toda persona condenada está sujeta a una multa ilimitada. Al mismo tiempo, en las últimas semanas, la conocida activista provida británica Isabel Vaughan Spruce, de March for Life UK, recibió una indemnización de 13.000 libras y una disculpa de la policía después de demostrar ante el tribunal que su arresto por La oración silenciosa frente a un centro de abortos fue injusta y violó sus derechos humanos.
Como dijo durante la Marcha por la Vida de este año en Londres:
Nunca habrá paz en nuestro país a menos que primero la creemos en el útero, una paz protegida por la ley. Todos nos volvemos cómplices del aborto a través de nuestra apatía o silencio. Nuestra indiferencia hacia el aborto tiene consecuencias que pueden costarnos muy caras a nosotros y a nuestros seres queridos”.
Por Elżbieta Sobolewska-Farbotko.
Martes 24 de septiembre de 2024.
Radio Bobola.
