* Entre mayo y junio de 1983 en Roma hubo una ‘altísima concentración’ de desapariciones.
Entre mayo y junio de 1983 en Roma hubo una «altísima concentración» de niñas desaparecidas con una edad media de 15,9 años en mayo y 15,6 años en junio, en la misma zona donde se perdieron las huellas de Emanuela Orlandi y Mirella Gregori.
Lo anterior es un «hecho científico» que surgió de un estudio encargado por el abogado de la corte de Perugia, Valter Biscotti, a dos criminólogos: Franco Posa, director científico del instituto de Neurointeligencia, y Jessica Leone, su colaboradora.
El abogado, apasionado de los casos sin resolver, explica a ANSA que se «interesó por pura curiosidad» en la historia de Emanuela Orlandi. Luego, por iniciativa propia, se hizo cargo de un expediente que la policía entregó en 1983 a Domenico Sica, el primer magistrado que conoció del caso, haciendo que los dos criminólogos realizaran el análisis.
El resultado de la investigación fue: una lista de 177 personas desaparecidas, «todas mujeres», 39 de las cuales -se explica- en «Roma o alrededores» entre 1982 y 1983, centrándose en 34 casos. Luego se utilizó la tecnología de mapeo del crimen para ver si había algún vínculo con la desaparición de Orlandi en el área del Vaticano. Según Posa y Leone a una distancia de «como máximo unos 2,5 kilómetros del lugar donde fue visto por última vez.
Según los dos criminólogos, «de particular trascendencia técnica y científica es el testimonio de 16 desapariciones ocurridas en un período de tiempo entre mayo y junio de 1983″, con edades comprendidas entre los 14 y los 18 años.
“El interés -explica el estudio- está motivado por el hallazgo de un elevado número de casos incluidos en un espacio temporal y geográfico limitado, limitado al territorio del municipio de Roma. En el área geográfica considerada, 34 casos de desapariciones se identificaron relacionados por los siguientes factores: edad, sexo y localidad. Se trataba de sujetos femeninos con una edad media total de 15,7 años».
BISCOTTI, ‘INVESTIGANDO NIÑAS DESAPARECIDAS CON ORLANDI’
Según el abogado Valter Biscotti, los resultados científicos «sorprendentes» surgen del análisis que el instituto Neurointelligen, especializado en casos sin resolver, realizó a las personas desaparecidas en Roma, en la misma zona donde se perdieron las huellas de Emanuela Orlandi, así como durante el mismo período.
“Creemos -dijo el abogado- que esta figura amerita ser investigada desde el punto de vista investigativo. Indagar en el historial de estas niñas desaparecidas y sus últimos movimientos, averiguar si existe el más mínimo elemento que pudiera ser común, entre todas los conocimientos relativos a estas niñas e identificar los conocimientos comunes. Investigar todos los lugares frecuentados por estas niñas e identificar los aspectos comunes».
Abogado Biscotti se ocupó como defensor de algunos de los casos judiciales más llamativos de los últimos años, desde el asesinato de Alberica Filo della Torre a Meredith Kercher, de Salvatore Parolisi a Avetrana, hasta el monstruo de Florencia.
El abogado -que como caso sin resolver también revisó el crimen del periodista Mino Pecorelli- anuncia que ahora el estudio será enviado al comisionado nacional de personas desaparecidas y a la Asociación Nacional Penélope que siempre se ha ocupado de estos problemas.
«Naturalmente – explica el abogado Biscotti – el expediente con el informe relativo está a disposición de las familias Gregori y Orlandi y del fiscal de Roma si fuera de su interés.»
ROMA, ITALIA.
ANSA.
